Los últimos días se habla algo menos de Siria, pero más noticias llegan desde allí, más confusa estoy… Los medios de comunicación sirven tantas “versiones” y “opiniones” que ya no sé en qué creer… No obstante, creo que es mejor tener una opinión, aunque ésta sea equivocada, que no tener ninguna… Mi Padre suele decir que “solamente las vacas no tienen ni cambian de opinión”.
Así que me atrevo recopilar las siguientes preguntas:
Primero, ¿Es una conspiración o un sabotaje diseñado en el exterior tal como lo han sugerido las autoridades sirias? Y si es así, ¿Quién podría estar detrás y tener algún interés en “desestabilizar” Siria?
Desde un punto de vista “interior”, hay que recordar que Bashar al-Assad fue elegido presidente mediante un referéndum (el único candidato del partido gobernante Baaz – Partido del Renacimiento Árabe Socialista) en 2000 y reelegido tan sólo hace cuatro años (con el 97%), y ha sido considerado un hombre con un prestigio mucho mayor que su padre Hafez al-Assad…
Y ahora ha llegado el Momento en que los sirios se están manifestando contra la dictadura del Baaz representada en el poder por la familia alauita Assad (los alauitas son una minoría chií, pero en Siria la mayoría es suní) desde hace ya cuatro décadas (existen otros partidos menores que junto al Baaz forman el Frente Nacional Progresista, pero el Baaz lo controla todo). Su ideología en su mayor parte es laica y combina el socialismo árabe y el nacionalismo panarabista. El primer día que el Baaz llegó al poder, dictó el estado de emergencia que suspendía muchos aspectos de la Constitución, permitía arrestos por “debilitar la seguridad nacional”, detenciones a los opositores, y luego – el apagón informativo y la censura de páginas web... Sin embargo, la economía o estabilidad de Siria parecía estar mucho mejor que la de Túnez o Egipto…
Hasta que llegó la “primavera árabe”… Y los sirios - los últimos en sumarse a las protestas - salieron a la calle. Salieron para exigir sus libertades y por la liberación de los encarcelados por “el crimen de opinión”… Resulta llamativo y bastante irónico que Siria ha sido el último país - un país que durante tantos años fue aislado internacionalmente, sometido a sanciones, acusado de mantener vínculos con grupos terroristas, acusado de desestabilizar Iraq y Líbano, bombardeado por Israel… Todo para debilitar el régimen… Sin éxito – hasta ahora…
Irónico, porque el presidente al-Assad fue uno de los primeros en pronunciarse tras el comienzo de la “primavera árabe”, afirmando que las protestas no llegarían a Siria, porque el país era “estable” y las autoridades - “muy cerca de las creencias de la gente”. Siria tenía unos estrechos vínculos con los movimientos de resistencia iraquí y palestina, y con Irán, en contra de “la corriente occidental”, y una estrecha cooperación con Hezbolá… Siria era “portavoz de las causas árabes” manteniendo una línea nacionalista árabe y apoyando la resistencia contra Israel. Por otro lado, se decía que el liderazgo de Siria era “un bastión” contra los Hermanos Musulmanes. También se decía que era muy poco probable que ocurrieran en Siria protestas anti-sistema – incluso la manifestación del 4 de febrero, convocada desde la página de Facebook por uno de los grupos a favor de la Revolución Siria, realmente no llegó a producirse (puede que fuera porque las autoridades sirias habían cortado el acceso a Facebook… y – por lo tanto - estos grupos tenían que dirigirse principalmente a la gente de fuera de Siria) y un grupo de manifestantes salió a las calles de Damasco varios días después (cuando un hombre fue supuestamente golpeado por la policía).
Pero una cosa es ser “portavoz de las causas árabes” en la política exterior y otra - carecer de “la dignidad” en la política interior. Cuándo un pueblo se levanta, se levanta contra la pobreza, contra la injusticia social, contra la corrupción y/o contra las restricciones de sus libertades… Se decía que Egipto y Siria se diferenciaban por sus políticas exteriores, pero no mucho – por su situación interior… Pero los árabes luchan sobre todo por su dignidad y su derecho a ser escuchados por sus gobernantes, no sólo por “mejoras económicas”.
Segundo, ¿Por qué están bombardeando Libia y no intervienen en Siria? ¿El Occidente se limitará solamente a las nuevas sanciones contra el régimen que se han extendido a varias empresas y personas?
¿Por qué nadie habla de “las razones humanitarias” que podrían ser tan válidas en Siria como en el caso de Libia?
La respuesta no parece muy complicada - Siria se salva, porque tiene poco petróleo, más ejercito (y mejor equipado que Libia), fuerzas paramilitares que están entre las más grandes del mundo, importantes vecinos (Líbano, Israel, Jordania, Iraq, Turquía – el ministro turco de Asuntos Exteriores ha declarado recientemente que Turquía quiere una Siria “fuerte, estable y próspera” y a través de un proceso de reformas), y porque mantiene buenas relaciones con Irán, con el movimiento chiíta de Muqtada al-Sadr en Irak, con Hezbolá y con Hamás. Es decir, mejor “un diablo conocido” que “un diablo desconocido”… Atacar Siria podría iniciar un conflicto de repercusiones mucho más graves que en Libia y que ahora nadie se atreve provocar abiertamente.
Por otro lado… ¿Se puede descartar la posibilidad de que la “desestabilización” de Siria sería algo deseado por los que están interesados en debilitar Irán, Hezbolá o Hamás, o qué sería algo conveniente para debilitar la resistencia palestina?
Los últimos acontecimientos en Egipto permitieron abrir la frontera en Rafah con la Franja de Gaza (¿temporalmente, permanentemente, parcialmente? – todavía no está muy claro…) – algo que tuvo que ser bastante duro para Israel… Y Egipto otorgó autorización a dos buques militares iraníes para atravesar el Canal de Suez desde el Mar Rojo hasta el Mediterráneo para participar en entrenamientos en Siria – fue la primera vez desde la Revolución Islámica de 1979 que un buque militar iraní pasó por el Canal. Poco después, Irán envió más buques y submarinos hacia el Mar Rojo para detectar presencia de otros barcos militares... Ahora mismo Israel debe estar “bastante preocupado”…
Tercero, ¿Se puede solucionar la situación en Siria a través de un proceso de diálogo o reformas, entre otras - una reforma inmediata de la Constitución que represente mejor al pueblo sirio? ¿Hay alguien que se opone al diálogo o a las reformas? ¿Y qué pasará con los miles de refugiados sirios, instalados en la frontera entre Siria y Turquía, que han huido recientemente de su país?
Ahora mismo existen varios guiones posibles en Siria… Algunos descartan por completo la toma del poder por parte de los Hermanos Musulmanes (los mismos que no reconocen el estado de Israel); otros especulan sobre la sustitución de al-Assad por un alauita vinculado con el aparato policial (descartando al hermano menor del presidente, Maher, conocido como “el Guerrero”, quien controla las unidades militares alauitas – se especuló que el padre de Maher había pensado en él como heredero, pero lo descartó por su “mal genio”) o por otro miembro de la familia Assad, como Assef Shawkat (conocido como “el Cuñadísimo", el cuñado del presidente y general del ejército). Algunos predicen un gobierno suní (los cristianos probablemente preferirían el gobierno actual a un gobierno suní), otros - cualquier nuevo gobierno que mejore las relaciones con el Occidente (alejándose al mismo tiempo de Irán y Hezbolá), o que el régimen dará paso a un gobierno democrático y liberal (versión “optimista”), facilitando el regreso de las negociaciones con Israel. O que se fortalecerá la alianza entre Siria, Irán y Hezbolá, o que Bashar al-Assad mantendrá su poder aplicando reformas, o que al-Assad luchará hasta el final como Gadafi… O que se irá al-Assad y junto con él se irán muchos… O que se irá la familia Assad, pero Bashar se quedará… O se levantará TODO el país y estallará una guerra civil… Muchas posibilidades…
Posibilidad de una guerra civil siempre causa muchos temores… Una confrontación muy violenta y masiva, y más sangre derramada sería el peor escenario posible... Por lo tanto, algunas voces han llamado, en varias ocasiones, por un diálogo con las autoridades (entre otros, Ribal al-Assad, director de la Organización para la Democracia y la Libertad de Siria), por las protestas pacíficas, por una profunda reforma que lleve a “un gobierno de unidad nacional”…
De momento, los medios de comunicación no pueden verificar la información que llega desde Siria. Entre otros, Al-Jazeera admite que las muertes no han podido ser verificadas de manera independiente debido a las restricciones sobre la información en el país. Si no se puede verificar las muertes, tampoco se pueden verificar muchas otras cosas… A veces ocurre que la única fuente de los medios de comunicación son manifestantes o activistas, porque los periodistas no pueden ver ni comprobar nada… Sin embargo, por lo menos en una ocasión, las muertes han sido reconocidas por la televisión estatal siria, pero con una versión muy distinta (que en Barzeh un francotirador abrió fuego contra los agentes de seguridad, hiriendo a muchos y matando a tres civiles).
Bashar al-Assad admite que el pueblo sirio está presentando “demandas legítimas” – es que ahora NO PUEDE NO ADMITIRLO. Mientras tanto, continúa la violencia, los manifestantes antigubernamentales se enfrentan contra los simpatizantes de al-Assad, el presidente decreta una amnistía general, propone la elección de un nuevo Parlamento en agosto y un plan de “reformas globales”, y al mismo tiempo asegura que los sirios son capaces de resolver sus problemas por ellos mismos… Por otro lado, al pueblo sirio se le agota la paciencia – y, a simple vista, los cambios producido en otros países de la “primavera árabe” (excepto Libia que es una gran incógnita) han favorecido el Momento Oportuno… Los sirios quieren reformas inmediatas, lo mismo que exigió Turquía hace unos días, mientras al-Assad no tiene tanta prisa… Pero al-Assad se está arriesgando mucho - en un mes pueden ocurrir muchas cosas…
Y sólo hay dos cosas que tengo muy claras desde el principio - lo que realmente importa es el pueblo sirio y su opinión, y los gobernantes son para el pueblo y no el pueblo para los gobernantes…
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